La restauración de monumentos en España es una tarea fascinante.
Fundamentalmente porque no hay pueblecito sin Historia, ni ciudad que no tenga su patrimonio artístico y monumental. Tal es nuestra riqueza y tal es el peso de la Historia de una nación longeva y rica en Arte.
Y ciudades, la inmensa mayoría, que solapan un período con otro, un estilo arquitectónico con otro, y capillas, iglesias y ermitas que se empezaron a construir en un período y luego vemos superpuestas capas de otros hasta quedar rematada. Por no hablar de otras expresiones del Arte: pintura, música, literatura, resulta apabullante vivir en un país que mires hacia donde mires tienes algo que te deslumbra.
Pero hasta los monumentos más sólidos y los más esplendorosos acusan el paso del tiempo
El clima, por el frío y el calor; La acción del hombre, por la contaminación, e incluso por las reformas o restauraciones mal planificadas… Y el mismo tiempo que ya mencionamos antes, el tiempo pasa silencioso pero hace mella y erosiona. Para todos esos casos estamos nosotros, avalados por nuestra trayectoria que nos aúpa como una de las empresas especializadas en la restauración de monumentos en España con mejor reputación.
Hacemos gala de nuestro equipo, pero no por soberbia sino por el placer de compartir, todos nosotros, el amor al Arte. El amor a nuestros monumentos y la pasión por crearlos, pero sobre todo de recrearlos y recuperarlos si tal fuera el caso.
Contamos con un nutrido equipo pluridisciplinar que, por separado hacen delicias en la restauración, pero todos juntos forman un equipo de apasionados que hace su labor con esmero porque antes que obligación, que lo es, es vocación.
Cuando iniciamos un proyecto lo hacemos con detenimiento y con cariño
Lo estudiamos y lo planificamos al detalle, para que la reforma fluya y concluya de modo más que satisfactorio para quien ha depositado su confianza en nosotros.
Cada proyecto un reto y cada reto una solución, No hay dos trabajos iguales como no hay dos monumentos iguales. No importa que nos encarguéis la restauración de un lienzo castigado por el humo de los cirios o un pórtico. Lo estudiamos, calibramos y lo abordamos haciéndoos sentir, desde el primer minuto que estáis en buenas manos. No decimos «que estáis en las mejores manos» porque no pecamos (y ya lo dijimos antes) de soberbia. Pero sí garantizamos nuestra competencia, y somos muy autoexigentes con nuestro trabajo, porque cada restauración que nos encargáis implica realzar y recuperar un pedacito del Patrimonio Histórico español.
Y ese pedazo de Patrimonio, a nivel global puede ser una referencia más en un archivo, pero a nivel local a veces lo es todo
Puede ser el orgullo de un pueblecito. El reclamo turístico que alimenta a una comarca. Puede ser el lugar de culto de un barrio, o de toda una ciudad… y cada uno lo mira como propio, siendo de todos, y a todos les dolería verlo echarse a perder, porque forma parte de sus vidas. Hasta ese detalle cuidamos cunado abordamos una restauración.